Beatriz y Carlos fueron una pareja que, desde el principio, tenian muy claro lo que NO querian , una pareja de arquitectos con ideas muy claras y una boda extremadamente oiginal. El marco era inmejorable, el jardín del museo de Bombas Gens en Valencia era el escenario perfecto tanto para la ceremonia como para el cocktail posterior.
No habia nada que hacer para competir con la majestuosidad de este jardin en pleno mes de Junio, estaba todo en su maximo explendor , asi que , acordamos realizar una boda de contrastes utilizando todo el material en flor seca y preservada.
Creamos , entre las sillas de Louis Gosht trasparentes que conformaban el espacio para la ceremonia, un pasillo de esculturas en base de arcilla ceramica hechas a mano de donde salian distintas hierbas de flor seca y silvestres en tonos naturales junto con pampas y plumeros en diferentes tamaños y colores que llegaban a un improvisado altar realizado con hojas de palmera washingtonia y hojas secas que enmarcaban la cama balinesa donde se produjo el acto principal.
La mezcla de estos materiales, el maravilloso jardín de fondo combinadas con camas y sombrillas balinesas fue perfecto, conseguimos entre todos crear un ambiente perfecto, ellos eran especiales y su boda no podia ser menos.
El ramo de Bea, acorde a como se habia planteado su boda, se hizo a base de hojas de palmera, flor seca y preservada conbinada con exclusivas rosas de jardín empolvadas y Rosa Wetsmister en tono café. Una autentica maravilla.
